Juan Taveras Hernández |
Por
JUAN T H
No
estoy a favor de quienes han iniciado una campaña en busca de la presidencia de
la República por el Partido Revolucionario Dominicano. Me parece descabellado, absurdo.
Que
me perdonen los amigos que han iniciado una carrera hacía la nominación
presidencial, pero considero que es un error. No es el momento. Cualquier
campaña dentro del PRD, que no sea para elegir las nuevas autoridades, es extemporánea. Incluso insensata, no importa
quién sea, como se llame, ni qué posición ocupa o haya ocupado. (Y vuelvo a
pedir perdón)
La
tarea del momento es rescatar al PRD, quitárselo al PLD y al gobierno que lo
tienen secuestrado utilizando a Miguel Vargas y al Tribunal Superior Electoral
para que no sea una opción de poder. Todo cuanto se haga que no vaya en la
dirección de retomar al PRD, aleja la posibilidad de estructurar una fuerza
política capaz de acabar con la hegemonía del PLD en el país.
Sin
un PRD grande, disciplinado, unido, bien organizado en todo el territorio nacional,
no será posible ganar el Congreso, los ayuntamientos y la presidencia de la
República.
Si
el PRD no adquiere espíritu de cuerpo y cambia su visión conservadora y
atrasada de la forma de hacer política, no llegará lejos. El PLD, para
desgracia del pueblo, se mantendrá en el poder, con Leonel Fernández -¡Zafa!- de candidato, lo cual será una
tragedia.
Todos
los “presidenciables”, y los que no lo son, tienen que trabajar en una sola
dirección para no debilitar las fuerzas ni las posibilidades de terminar
exitosamente la crisis que sacude al PRD. Lo primero es solucionar la crisis
interna del modo que sea, pero ya.
Como
no es posible un entendimiento con Miguel Vargas, que sigue aferrado al PLD
para completar su misión de impedir que el PRD vuelva al poder en 2016, es
correcto continuar los preparativos de la Convención para elegir las nuevas
autoridades como mandan los estatutos en el plazo establecido, como incluso lo
ha reconocido la Junta Central Electoral.
Luego,
cuando ese proceso haya terminado, que el PRD esté en las manos que sus bases
elijan, entonces, solo entonces, será, no solo correcto, sino oportuno, la escogencia, democrática y plural, de los
candidatos a senadores, diputados, alcaldes, regidores, presidencia y
vicepresidencia de la República.
No
puede haber grupos haciendo reuniones
para promover a tal o cual aspirante a la Presidencia de la República,
por legítima que sea, cuando el partido está en una encrucijada. No puede haber
dirigentes gastando dinero y energía en campañas de imagen dejando que sean
otros los que asuman la situación crítica del partido. No lo concibo. Es
absurdo. No es inteligente. (Y pido
perdón otra vez porque no quiero que nadie se sienta ofendido)
Cada
cosa en su momento, cada cosa en su lugar. Lo primero, primero. Y lo primero es
el PRD, porque sin PRD no habrá candidaturas exitosas para nadie, ni siquiera
para los que se sienten seguros. Sin el PRD en las manos idóneas, sin el PRD fuerte, que nadie se vista, que no
va. (Pido perdón por última vez. Pero si
no me quieren perdonar, que no me perdonen. Total…)