miércoles, 3 de octubre de 2012

"EL CONDUCTOR Y SU MÚSICA"


"Todo el mundo, se puede decir, estaba a la expectativa sobre lo que pudiera ocurrir ese día, aunque no todo el mundo estuviera invitado al concierto o si, Invitado, dispuesto a formar parte de un coro donde cantaban voces disonantes".

Bonaparte Gautreaux Piñeyro, El Autor.

El hombre terminó de cambiarse de ropa, tomó la batuta y se dispuso a salir luego de despedirse de su familia. En la calle lo esperaba un coro de chupamedias, cagatintas y plumíferos, quienes aplaudían de modo muy extraño mientras extendían la palma de la mano derecha hacia arriba.