sábado, 1 de septiembre de 2012

"LA PAZ"


"En nuestro país hacen falta muchas cosas para conseguir la paz".







Bonaparte Gautreaux Piñeyro, El Autor.

La paz es el equilibrio que permite que una sociedad disfrute de sus derechos, cumpla con sus deberes y donde ninguna fuerza ni grupo hegemónico logre imponerse por la fuerza.
La paz es el punto donde todos nos encontramos satisfechos, conocedores de que somos iguales ante la ley, que nadie es mejor que nadie.
La paz es un resultado de la democracia, que produce  el equilibrio de los asociados  en sus relaciones con el poder y en sus relaciones con los demás.
Hay paz cuando hay justicia, cuando hay una aplicación y una administración de las leyes que no tenga miramientos al imponer las sanciones que considere oportunas.
La paz se construye con la voluntad de la mayoría dirigida hacia el bien común. Es una conquista que se logra cuando la mayoría elimina cualquier obstáculo que pretenda mantener las injusticias y privilegios.
La paz existe cuando hay consideración y respeto por el ser humano,  por cada persona, hombre, mujer, niño, trabajador,  estudiante, profesional, militar, policía, comerciante, empleado, empleador...
La paz es el nuevo nombre del desarrollo y el orden social, dijo el   Papa Juan Pablo II. Y el desarrollo impone una distribución de la riqueza que permita a los más vivir al mismo tiempo que los menos...
En la oficina de don Luis E. Delmonte, en Barahona estaba escrita en una pared esta frase: “más que un más que un medio de hacer dinero, el trabajo es un medio de hacer dignidad”.
La paz se siembra con empleos y con un sistema de educación en el cual el cielo sea el limite para quienes buscan conocimientos y oportunidades que permitan al hombre trabajar, inventar, mejorar, reformar, descubrir.
Los problemas dejados por el mal gobierno de Leonel Fernández son muy graves, la multiplicación del analfabetismo, el desarrollo de la  pobreza, el desempleo, la ampliación del círculo de la inseguridad,  el pago del despilfarro del gobierno, la deuda externa y la deuda publica interna, deben ser encarados con valor, serenidad y seriedad.
El anuncio de que el gobierno quiere nuevos impuestos para resolver sus problemas sin apretarse el cinturón mas allá de lo posible, como parte de un real plan de austeridad que retome el camino del desarrollo que beneficie a la mayoría, puede tener consecuencias impredecibles. Así no se construye la paz.
Si no se toma el toro por los cuernos esos detonantes pudieran, por combustión espontanea, encender una mecha   que produzca  una conmoción social de tal magnitud que nadie sabe cuáles títeres quedarían con cabeza.
Ante situaciones como esta mi madre, Nieves Piñeyro de Gautreaux, solía decir: “si no lo resolvemos, lloraremos lágrimas de sangre”.
De: Bonaparte Gautreaux P.

"VOLVER A LAS CALLES"


"El pueblo tiene que hacer conciencia de sus males"


Juan Taveras Hernández, El Autor.


El pueblo dominicano tiene que volver a tomar las calles para luchar contra la pobreza y el abandono de que es víctima de parte de las autoridades.
El pueblo no puede seguir pagando, con su miseria, los platos rotos por otros.
Hay que volver a los sindicatos, federaciones, confederaciones y centrales obreras autónomas, no amarillas; organizar a los campesinos, las amas de casas. Darle un carácter distinto a las juntas de vecinos.  Es necesario rescatar los frentes de masas: estudiantil, obrero y campesino, y unirlos con un propósito común. Nadie puede ser indiferente ante lo que está ocurriendo en el país.
Debemos evitar que el crimen y la delincuencia sigan ganando las calles para imponer el terror; que el consumo y tráfico de drogas se haga de manera pública. Todo ante la mirada cómplice de las autoridades civiles y militares. (El narcotráfico y el lavado fueron soportes importantes del pasado gobierno)
Quienes se robaron las elecciones el pasado 20 de mayo para mantenerse en el gobierno y evitar la cárcel, quieren ahora destruir al PRD, único partido de oposición para poder así continuar robándose el país impunemente.
La crisis económica no tiene solución dentro del marco político actual. La deuda externa ya alcanza los 25 mil millones de dólares; el déficits fiscal terminará rondando los 120 mil millones de pesos. El desempleo crecerá, del mismo modo que aumentará el costo de la vida, el transporte público, los combustibles, la tarifa de la energía eléctrica, etc.
No habrá dinero suficiente para educación, salud, vivienda, agua potable, seguridad ciudadana, etc.
El PLD pretende imponer otra  reforma fiscal y tributaria que afectará más a los pobres y la clase media. Serán los que menos tienen quienes pagaran más. Los  pobres seguirán subsidiando la corrupción.
La única manera que tiene el pueblo de evitar las violaciones a sus derechos económicos, políticos y sociales, es organizándose y organizando su lucha rechazando las mentiras del gobierno y de quienes se llaman oposición desde una línea política derechista y de colaboración con el gobierno.
Si los pobres no crean sus propias organizaciones, si no paren sus propios dirigentes y sus  líderes, seguirán  siendo víctimas de traiciones y engaños, seguirán siendo atropellados y vejados, seguirán sumergidos en la pobreza tanto material como espiritual. Y no habrá futuro para ellos, ni para sus hijos que terminaran muertos en “intercambios de disparos” o presos en las peores cárceles del país.
El pueblo tiene que hacer conciencia de sus males. Determinar quiénes son los responsables de los mismos. Organizarse y tomar las calles para escoger un camino propio, no el camino de la conciliación y la traición, como ha sucedido muchas veces.
La gente del gobierno se robó las elecciones,  secuestró la democracia. Y está destruyendo poco a poco el país instaurando una dictadura constitucional y mediática de injusticias y privilegios mientras el pueblo sufre y mure de hambre, sin empleo, sin comida, sin vivienda, sin seguridad, sin educación ni salud. ¡Y eso es sencillamente intolerable!