miércoles, 13 de marzo de 2013

PRESIDENTE HIPÓLITO MEJÍA FELICITA A SU SANTIDAD FRANCISCO I POR SU ELECCIÓN



Presidente Hipólito Mejía 

Santo Domingo.– El Presidente Hipólito Mejía al felicitar al Papa Francisco I por su elección, dijo que la misma “me llena de orgullo que la sucesión de Pedro y  en lo adelante, cabeza y guía de nuestra Santa Iglesia, descanse en un latinoamericano”.
Resalto que el Papa, “durante su ministerio sacerdotal, ha dado muestras infinitas de humildad, entrega y solidaridad con los débiles de la tierra, en un espíritu humanista que constituye fuente de inspiración para los hombres de buena voluntad en nuestro continente y en el mundo”.

El Presidente Mejía ofreció a Su Santidad, la reiteración de mi fe y mis humildes oraciones para que las bendiciones de su alto ministerio toquen a quienes las necesiten en cualquier lugar de la tierra.

A continuación el texto de la carta del Presidente Mejía a Su Santidad Francisco I

“Santo Domingo, R.D.
13 de marzo de 2013.-

“Su Santidad, Francisco I
Vicario de Cristo y Obispo de Roma
Sus manos.-

“Santo Padre:

“Su ascensión al solio papal constituye un especial motivo de alegría y satisfacción para quienes practicamos con devoción la fe católica y sobre todo, para quienes como yo hemos recibido, generosamente, la sabia formación de las escuelas jesuitas y su guía espiritual.
 “Como dominicano y más aún como hispanoamericano, me llena de orgullo que la sucesión de Pedro y  en lo adelante, cabeza y guía de nuestra Santa Iglesia, descanse en un latinoamericano, que por demás, durante su ministerio sacerdotal, ha dado muestras infinitas de humildad, entrega y solidaridad con los débiles de la tierra, en un espíritu humanista que constituye fuente de inspiración para los hombres de buena voluntad en nuestro continente y en el mundo.
“Reciba, Santo Padre, mis más entusiastas felicitaciones, al tiempo que aprovecho para manifestarle las muestras de mi más alta consideración, la reiteración de mi fe y mis humildes oraciones para que las bendiciones de su alto ministerio toquen a quienes las necesiten en cualquier lugar de la tierra”.

Muy atentamente,

Hipólito Mejía