martes, 2 de octubre de 2012

NO PAGUEMOS IMPUESTOS


Nuestro dinero se utiliza para financiar los viajes en primera clase de las esposas,  hijos y  amantes (las Yuleidy) de los funcionarios.

Juan Taveras Hernández, El Autor.

Estoy de acuerdo con una huelga nacional, de ciudadanos y ciudadanas, desde el más pequeño hasta el más grande, desde el más rico hasta el más pobre, para no pagar impuestos hasta tanto el gobierno no enfrente la corrupción y termine con los privilegios de funcionarios, familiares, amigos y relacionados. (En sus bolsillos se llevan más de cien mil millones de pesos todos los años)
Lo que pagamos impuestos directos e indirectos no recibimos beneficios en obras de bien social.
El dinero no se usa en hospitales, escuelas, viviendas, energía, seguridad social y ciudadana. Nuestro dinero lo vemos en vehículos de lujo, helicópteros, aviones, yates, apartamentos en torres millonarias, casas de veraneo ubicadas en los centros turísticos más caros, viviendas en Estados Unidos y hasta en Europa, cuantas bancarias millonarias en pesos y en dólares, tanto en el país como en el extranjero.

Nuestro dinero se utiliza para financiar los viajes en primera clase de las esposas,  hijos y  amantes (las Yuleidy) de los funcionarios. Los ciudadanos pagamos sus cuentas millonarias en los restaurantes.

Gracias a nuestros impuestos los funcionarios viven como príncipes. Todo le sobra, nada le falta. Llegan pobres a los cargos. Salen podridos en dinero.

Esos señores, señoritos y señoras de la administración pública, viven gratis a costa del pueblo. Todo le sale “free”. (Gratis): Combustible, supermercado, servicio doméstico, seguridad militar en sus residencias,  flotilla de vehículos de lujo de ocho cilindros con chófer y guardias incluidos,  educación de los hijos  en el país y en el extranjero con becas cubiertas por los pendejos, etc., etc., etc.

Y cuando salen de los cargos sus fortunas son incalculables. Todo gracias al pago de nuestros impuestos. Y como si fuera poco, crean reglamentos y leyes para obtener pensiones y jubilaciones millonarias. (Un robo descarado ante los ojos de los pendejos que somos la mayoría de los dominicanos).

Ellos viven como  príncipes porque pagamos impuestos. Si no lo hiciéramos, estarían tan pobres como la mayoría de los ciudadanos. Los pobres hacen más ricos a los ricos con su miseria. Los pobres hacen más ricos a los políticos corruptos con su voto. (No sigamos votando por esos salamis de la política).

Si no pagamos impuestos y no votamos por ladrones, el país cambia.

En Estados Unidos el que se roba un peso de los contribuyentes va preso, no importa como se llame ni la posición económica, política y social que ocupe. Igual pasa en los demás países de verdad. Pero en la República Dominicana no ocurre igual. Todo el que puede dejar de tributar, lo hace. (¡Con razón!).

Una  buena parte de los empresarios se las ingenian para no pagar  o pagar menos. La clase media y los pobres, no pueden porque no tienen poder. Los funcionarios se asocian con los oligarcas para estafar al pueblo  dejando de tributar  lo que ordena la ley.

Cuando llega la crisis, como ahora, el gobierno no reduce el gasto, no se restringe, no es austero, no reduce la evasión fiscal, no enfrenta la corrupción.  Simplemente quiere cargar a la clase media y a los pobres, con más impuestos cuando lo correcto es cobrarle a todos, sin distinción, y quitarles a los funcionarios  lo que le han robado al pueblo.

Si el gobierno hace eso, pagamos. Si no lo hace, no paguemos. (¡Y que el diablo nos lleve a todos!)