miércoles, 26 de septiembre de 2012

"EL MOTE DE TRAIDOR"


"Podrá seguir siendo presidente de su partido por toda la vida, como el pretende".

Daniel García Archibald, El Autor.

Por más que quiera y sin importar los esfuerzos que haga, y las simpatías que compre, al ingeniero Miguel Vargas Maldonado le será muy difícil, quizás imposible quitarse el mote de traidor.


Podrá seguir siendo presidente de su partido por toda la vida, como el pretende. Conseguir la candidatura presidencial para el 2016, y hasta quien sabe, ser presidente de la República, pero no podrá quitarse el mote de traidor.

Y cuando habla, no hace más que confirmar su traición, como lo hizo en la entrevista concedida al periódico Diario Libre, donde arremetió en contra de quien fuera candidato presidencial de su partido, el ingeniero Hipólito Mejía, culpándolo de la derrota.

En ningún momento se refiere al uso de los recursos del estado por parte del gobierno del Leonel Fernández y el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), de las irregularidades que se dieron durante el proceso de votaciones, que hasta los propios peledeístas y sus aliados hoy admiten.

O sea que la traición no sólo fue durante la campaña electoral y el día de las elecciones, por parte del ingeniero Vargas Maldonado y sus seguidores, sino que sigue de manifiesto ahora como una confirmación.

Decir, nada más y nada menos el presidente del PRD, que el candidato de su partido no representó el cambio esperado por la población, no es más que una confirmación del papel traidor en contra de su partido por parte de Vargas Maldonado.

Ni los peledeístas se han atrevido, después del proceso electoral, a decir semejante cosa, muy por el contrario, durante toda la campaña electoral se ocuparon de explotar la no integración de Miguel Vargas y sus seguidores a la campaña de su partido y destacar los ataques de voceros de éste y su propia esposa contra Hipólito Mejía.

Pero partamos del hecho de que ciertamente el candidato del PRD tenía debilidades como la de no saber representar el cambio esperado por la población, si Miguel quería el triunfo de su partido, porque no hizo nada para corregir esa falla, en su condición de presidente del PRD? Ah!, no lo hizo porque como él mismo dijo a varias personas que intentaron acercarlo a Hipólito Mejía que su problema con éste era personal y no le interesaba ningún entendimiento.

Su compromiso no era con Hipólito Mejía, el PRD y esa militancia que hoy llora con dolor verse fuera del poder, sino con Leonel Fernández, el PLD y Danilo Medina, que hoy es el presidente gracias, entre otros factores, a la traición del presidente del partido.

No sólo para Hipólito Mejía, el PRD y esa militancia hambrienta de poder, Miguel Vargas será un traidor toda la vida, sino también para los propios peledeístas, Leonel Fernández , Danilo Medina y la población en general.

Porque como dijera una vez el propio Danilo Medina, cuando algunos de sus seguidores se les vendían a Leonel en la contienda interna del 2007, refiriéndose al traidor, “ llega un momento que ni sirve él, ni sirve para quien lo compra”.